Las vegetaciones o adenoides lo constituyen un grupo de tejido linfático llamado también amígdala de Luschka que forma parte normal del tejido linfático ( encargados de la defensa y similar a las amígdalas) en los niños que se sitúan en la parte posterior de la nariz, justo donde se comunica con la faringe y relacionado con las trompas de comunicación con el oído.
Las vegetaciones o adenoides comienzan desde el nacimiento aumentando de tamaño durante la infancia pero van desapareciendo al llegar a la pubertad de tal manera que casi ningún adulto posee ya vegetaciones o adenoides.
Cuando este tejido o amígdala de Luschka (vegetaciones o adenoides) se inflama por infecciones o aumenta de tamaño por otras causas, no todas bien conocidas, dificulta la respiración por la nariz y la correcta ventilación de los oídos y entonces se convierte en lo que denominamos adenoiditis que puede requerir en algunos casos su extirpación quirúrgica.
Los efectos más importantes que produce las vegetaciones o adenoides en los niños cuando se inflaman o infectan son:
Catarros repetidos y continuos que no acaban de curar completamente por retención de mucosidad en la zona
Apnea y ronquidos al dormir, por interrupción parcial de la entrada del aire por la garganta, haciendo que la respiración se retrase algunos segundos.
Otitis de repetición ya que en el oído interno se forman secreciones que drenan por las trompas de Eustaquio hacia la garganta, pero que al estar comprimidas por las adenoides, mantienen la secreción dentro del oído pudiendo llegar a infectarse , dando lugar a dolor intenso de oídos que pueden llegar a perforarse para permitir la salida del liquido, a veces con sangre y que puede afectar seriamente la audición.
VEGETACIONES DIAGNÓSTICO.-
En primer lugar a través de los síntomas entre los que se encuentran la alteración del habla por lo que la «m» suena como «b» y la «n» suena como una «d» que es debido a que cuando el niño cierra la boca para pronunciar las letras «m» y «n» a través de la nariz no lo logra debido a que la nariz está bloqueada.
Al respirar por la boca tiende a resecarse y los niños suelen solicitar agua continuamente.
A la exploración oral del niño se aprecia moco espeso y purulento cayendo por la pared faríngea
Exploraciones como tocar las adenoides con el dedo son muy difíciles en los niños
Otros medios diagnósticos son:
La endoscopia que permite visualizar la adenoides y estructuras próximas
Estudio radiológico lateral del cuello (radiografía de cavum) que permite visualizar si hay aumento de adenoides
Tomografía axial computarizada (TAC) o la Resonanacia Magnética Nuclear (RMN) que dibujan con gran calidad de detalles las adenoides y las estructuras anexas
VEGETACIONES TRATAMIENTO.-
El tratamiento puede estar compuesto por suero fisiológico para lavados nasales, otros medicamentos dependiendo de la edad y siempre bajo supervisión médica son las gotas de vasoconstrictor nasal, sin que puede llegar a ser un tratamiento constante, antihistamínicos , antiinflamatorios y antibióticos.
Cuando el tratamiento habitual con estos medios no es suficiente se puede indicar la intervención de vegetaciones o adenoides mediante la cual se extirpan las vegetaciones o adenoides y que pueden estar indicado desde cualquier edad.